Reseña 01 | El día que se perdió el amor
¡Hola,
saltamontes! ^^
¿Qué
tal lleváis la semana? Si os digo la verdad estoy deseando que llegué el jueves
y pueda decirle adiós a mi semana de trabajo… ¡Qué larga se me esta haciendo!
^^
Pero
como yo sé que se hace más leve con una buena dosis de reseñas, aquí os dejo la
opinión sobre el segundo libro de Javier Castillo «El día que se perdió el
amor»

― FICHA TECNICA ―
Javier Castillo | Suma
de Letras | 17’90€ | 456 pág | Novela negra y thriller
― SINOPSIS ―
«A veces el amor te
pone en el camino equivocado para que sepas cuánto duele».
A las doce de la mañana del 14 de diciembre, una joven
llena de magulladuras se presenta desnuda en las instalaciones del FBI de Nueva
York con varias notas amarillentas en la mano. El inspector Bowring, jefe de la
Unidad de Criminología, intentará descubrir qué oculta la joven y su conexión
con otro caso, el de una mujer que aparece decapitada horas más tarde y cuyo
nombre coincide con el que estaba escrito en una de las notas. A medida que
avance en la investigación se dará cuenta de que este caso abre antiguas
heridas difíciles de cicatrizar.
― ENCUADERNACIÓN Y
MAQUETACIÓN ―
Bajo
mi opinión las portadas de los libros de Javier Castillos son sin lugar a la duda enigmáticas;
sabes antes de comenzar el libro que esa portada dirá algo de aquellos que
vas a encontrar entre sus páginas, pero sabrás cuál será «el detalle» hasta
que no leas la novela, hasta ese entonces no será rebelado. Yo ahora lo sé: el
vestido rojo. Un pequeño detalle que lo cambiara todo.
Sobre
la maquetación
de estos libros siempre diré que son curiosas, porque gracias a las fechas,
nombre y datos que aparecen al principio de cada capítulo podrás ir paso a paso
adentrándote en la novela y los misterios que esta ocupan. Cabe destacar que son singulares
y hasta cierto punto llamativo; algo que dentro de tanta normalidad e incluso
sobriedad en la novela negra y thriller, estos detalles destacan para darle un
«toque» más la novela.
Debo
reconocer que no tengo ni un más ni un menos sobre estos puntos.
— FORMA DE ESCRIBIR —
Conocí
a Javier Castillo con su primer libro «El día que se perdió la cordura» y no
sabía nada de él antes de que hubiese sido publicado por Suma uno de los sellos
de Penguin Random House; y eso que es un paisano mío y anteriormente se había
autopublicado en Amazon,
así como visitado «La noche de los libros» en uno de los edificios más antiguos
y con historia de mi ciudad, Málaga. Reconoceré que descubrir talentos de mi
cuidad y además con este nivel de éxito me da mucha alegría, así que decidí
leer sus libro y ver hasta que punto era merecido ese éxito. Lo es. Muy
merecido.
Con
su primer libro me engancho de tal forma su pluma que a veces me olvidaba que
estaba leyendo, yo sin saber como me había transportado a Salt Lake y estaba
viendo una trepidante aventura entre sus páginas. Lo bonito de ser lector es
que puedes viajar allí donde quieras con solo coger un libro. Y Javier, me transporto
de lleno. Sin embargo, con «El día que se perdió el amor» me he sentido más fuera
de sus páginas y no por la forma que tiene Javier de narrarnos la historia,
sino por el hecho de que en ocasiones tenía la sensación de que repetía algunos
patronos del primer libro y poco a poco me sacaba de sus páginas y me
hacía perder parte del interés que me mantuvo cautiva con su primer libro; lo cual, para mí, ha sido toda una pena,
porque sinceramente considero que tenía una muy buena historia entre sus manos
y podría haber hecho mucho más. Pero esa es mi opinión, que sin duda, no es la
verdad absoluta.
— TRAMA Y ARGUMENTO —
Entre
las páginas de «El día que se perdió el amor» Javier Castillo nos cuenta el
desenlace un año más tarde de la vida de sus anteriores protagonistas: Amanda,
Jacob, Steven…
Un final que todo el mundo o al menos yo estaba deseando con muchas ansias, sin
embargo, en la trama de esta segunda parte de una bilogía que sin duda prometía
mucho me he llevado un «chasco» (lo diré así porque tampoco puedo clasificar mi
desgana a una decepción). Creo que esperaba que Javier me diese mucho más, tal
vez que complicara mucho más las cosas e incluso que volviese a sorprenderme
con sus giros argumentales. Supongo que también yo iba con muchas expectativas
después del primer libro y encontrarme con una trama que no me sorprendía, no
me terminaba de cautivar y en algunos aspectos me dejaba indiferente, me entristeció.
Tras
un año de tranquilidad y escondite, Amanda y Jacob, se ven una vez más
envueltos en la espiral de crímenes que diecisiete años atrás los llevaron a
convertirse en las personas que a día de hoy son.
Steven,
padre de Amanda, lleva en prisión desde que lo arrestaran en Salt Lake un año
antes y de pronto se ve fuera de los barrotes de su celda por el desafortunado apuñalamiento
de su hija Amanda a manos de uno de los hombres que trabaja para la secta que
una vez la secuestro. Entonces todo se desencadena dando como resultado una
trama que en muchos sentidos se parece a la primera y que no deja ver nada más
allá de lo que ya sabíamos de la congregación que secuestro a Amanda diecisiete
años atrás.
Pese
a que con este segundo libro no me ha terminado de enganchar como con el
primero, estoy deseando tener la siguiente novela de Javier, que saldrá en
marzo.
— PERSONAJES —
Seré
breve, pues quitando dos o tres personajes, en esta segunda parte de la bilogía
«El día que…» nos volvemos a encontrar con los mismo personajes de la anterior.
Daré
comienzo con la figura de Bowring, el inspector del FBI que comienza a
investigar la aparición de una chica desnuda, magullada y con un montón de
papeles amarillentos a las puertas de la comisaría donde él trabaja. Esta chica de la cual no sabemos
el nombre remueva un caso complicado para el inspector del FBI y se verá
envuelto en una serie de acontecimiento que nos llevará, una vez más, a Salt
Lake.
Y
por supuesto, el personaje que no podía faltar, es Carla, hermana pequeña de
Amanda y que fue secuestrada por la secta que secuestro a su hermana mayor el
mismo día. Por
alguna razón estás personas han llegado a considerar a Carla como una especie
de sucesora de Laura, la mujer que soñaba con las mujeres que harían mal en
este mundo. Para mi el personaje de Carla es la única novedad dentro de un
montón de actos iguales. Aun así, no ha sido un personaje que me haya
emocionado o repelido como su antecesora: Laura.
Creo
que en esta ocasión no he sentido ni frio ni calor con los personajes de esta
novela, incluso en algunas ocasiones me han entrado ganas de darle alguna
bofetada a alguno de los antiguos por hacer lo que hacían. No sé, creo que me
he sentido atrapada con esta novela como con su primera parte.
— OPINIÓN PERSONAL —
Si
bien «El día que se perdió la cordura» me atrapo entre sus páginas de una forma
brutal y enigmática, con su conclusión «El día que se perdió el amor» no me he
sentido de esta forma. Quizás no me encontraba en el momento idóneo para leer
este libro o quizás simplemente no he sabido ver más allá de sus palabras. Lo
único que tengo claro es que no me ha terminado de gustar tanto como su primera
parte.
1 comentarios
¡Hola! Yo no leí el primero y son libros que no descarto pero tampoco me apetecen excesivamente. Un besote :)
ResponderEliminarNos encantaría saber tu opinión sobre esta lectura. ¿Te animas?